El tono de blanco recomendado para la decoración de la casa en 2026

La elección del "blanco esponjoso" como color predilecto para el 2026 va más allá de una simple moda
El tono de blanco recomendado para la decoración de la casa en 2026
Blanco Foto: Canva
lunes, 15 de diciembre de 2025

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La decoración de interiores siempre busca el equilibrio perfecto entre tendencia, atemporalidad y bienestar, y para el año 2026, la paleta de colores se decanta por la sofisticación serena. El tono de blanco que se perfila como dominante no es un blanco frío y puro.

Sino un "blanco esponjoso" (fluffy white), un matiz suave y ligeramente cálido que evoca calma y textura. Este blanco sirve como una base magistral, potenciando la elegancia original del hogar y actuando como el telón de fondo ideal para cualquier estilo decorativo.

La decoración con color blanco

Una de las principales virtudes de este tono de blanco es su capacidad intrínseca para interactuar con la luminosidad del espacio. Funciona excepcionalmente bien en las zonas de día—como salones, comedores y estudios—porque maximiza la luz natural disponible . Al reflejar la luz de manera suave en lugar de cruda, el "blanco esponjoso" crea una atmósfera brillante y aireada, ampliando visualmente el espacio. Además, es un color que actúa como un lienzo neutro y sublime, permitiendo que piezas de arte, cuadros conceptuales o mobiliario audaz tomen el protagonismo sin competir con las paredes.

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El poder de este color blanco reside en su naturaleza acompañante, un tono que no invade el espacio con su presencia. Precisamente por no resultar plano y por favorecer una atmósfera de calma y recogimiento, el blanco esponjoso encuentra su lugar también en el dormitorio. En estas estancias dedicadas al descanso, un blanco con matices suaves promueve un entorno tranquilo que facilita la desconexión. Al ser un tono que se siente envolvente pero no pesado, ayuda a crear santuarios personales donde la mente puede relajarse.

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Los interioristas recomiendan usar estos colores blancos claros en el "continente" de un proyecto, es decir, en paredes, techos y grandes superficies estructurales. Esta elección consciente permite que el espacio "respire", otorgando al interiorismo y al amueblamiento la oportunidad de tener su propio espacio y voz. Cuando la base es neutra y armónica, la introducción de texturas, maderas naturales o colores de acento se hace de manera más deliberada y elegante. De esta forma, el blanco esponjoso asegura que la atención se centre en los elementos de diseño y en la calidad de los materiales.

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