Descubre cuál es la bebida alcohólica que menos afecta la salud para brindar en Navidad
La época navideña está intrínsecamente ligada a las celebraciones y, con ellas, a los brindis con bebidas alcohólicas. Si bien es fundamental recordar que ninguna bebida alcohólica es intrínsecamente "saludable" y que el consumo debe ser siempre moderado, es posible elegir opciones que resulten menos agresivas para el organismo.
La clave está en el contenido de congéneres (subproductos químicos del proceso de fermentación) y en la cantidad de azúcares y aditivos. Para un brindis navideño más consciente, hay una bebida que consistentemente se posiciona como la menos perjudicia.
La bebida ideal para brindar
El vino tinto, especialmente en comparación con destilados oscuros o cócteles azucarados, se considera la opción menos dañina para brindar. Esta bebida tiene un proceso de fermentación, que preserva compuestos bioactivos presentes en la uva. Es la bebida con mayor contenido de resveratrol, un polifenol conocido por sus potentes propiedades antioxidantes. Al consumirse con moderación (una copa al día, según la mayoría de las pautas), el vino tinto se ha asociado en estudios observacionales con una mejor salud cardiovascular y la reducción de la inflamación.

La resaca y la toxicidad general de las bebidas alcohólicas están fuertemente influenciadas por los congéneres. Estas son impurezas y subproductos que se forman durante la fermentación, y que incluyen compuestos como el metanol y la acetona. Las bebidas alcohólicas más oscuras, como el whisky, el ron, o el brandy, suelen tener niveles de congéneres significativamente más altos que las bebidas más claras, como el vodka o el ginebra, y mucho más que el vino tinto. Un menor contenido de congéneres en el vino tinto se traduce en un menor estrés metabólico para el hígado y, potencialmente, una resaca menos intensa.

Si la preferencia es un destilado, las bebidas alcohólicas de color claro, como el Vodka y la Ginebra, son la siguiente mejor opción, siempre que se consuman solas o con mezcladores sin azúcar. Estos destilados pasan por un proceso de destilación más exhaustivo que elimina gran parte de los congéneres, resultando en una bebida más "pura" desde el punto de vista químico. Sin embargo, es fundamental evitar combinarlos con refrescos azucarados o jugos, ya que la adición de estas bebidas contrarresta cualquier beneficio de una baja concentración de congéneres.