El error de decoración que casi todos cometen con el televisor en el living
El televisor se ha convertido en un elemento indispensable en la mayoría de los hogares. Sin embargo, su presencia a menudo genera un conflicto estético en el salón o living. Pero un experto en decoración marcó ciertos errores al respecto.
A diferencia de una pieza de arte, un televisor es un objeto utilitario que, cuando está apagado, se convierte en una gran pantalla negra que puede arruinar la armonía visual del living. El interiorista español Pepe Leal advierte sobre este error común de decoración, señalando que la mayoría de las personas lo colocan en el centro de la pared como si se tratara de un Picasso, una ubicación que domina y satura el ambiente.
Cómo ubicar el televisor en el living
La principal recomendación de Leal es intentar disimular el televisor en el living lo máximo posible. En su opinión, el enfoque ideal es tratarlo como un elemento funcional, no como un punto focal de la decoración. Aunque hay quienes abrazan su presencia y lo exhiben con orgullo, para la mayoría de los interioristas, la clave es integrarlo de manera sutil en el diseño de la habitación. Esto permite que la atención se dirija a otros elementos del espacio, como una chimenea, una obra de arte o una pieza de mobiliario única.

Uno de los errores más comunes es colgar el televisor en la pared principal del living a una altura elevada. Según Leal, el lugar ideal para un televisor es en un rincón y a una altura baja. Esta ubicación hace que la pantalla sea menos obvia cuando no está en uso y ayuda a mantener la simetría del espacio. Además, al no colgarlo en la pared, se evita la sensación de que el aparato está flotando y se integra mejor con el resto de los muebles, creando un aspecto más cohesionado y menos agresivo.

Para quienes buscan una solución más radical, existen numerosas opciones para ocultar el televisor por completo. Se puede integrarlo en un mueble a medida con puertas corredizas o retráctiles que lo escondan cuando no se usa. Otra alternativa es utilizar espejos o cuadros motorizados que se deslizan hacia arriba o hacia los lados para revelar la pantalla. Estas soluciones son ideales para aquellos que valoran una estética minimalista y no quieren que la tecnología sea el centro de atención en su living.