Toma asiento antes de saber por qué debes colocar cáscaras de mandarina detrás de puertas y ventanas
La mandarina es mucho más que una fruta deliciosa: también se ha convertido en un recurso práctico para el hogar. En Perú, la costumbre de colocar cáscaras de mandarina en los bordes de puertas y ventanas volvió a ganar popularidad, gracias a sus múltiples beneficios.
¿Por qué poner cáscaras de mandarina en las puertas?
Este método natural no solo ayuda a ahuyentar insectos de manera efectiva, sino que también impregna los espacios con un aroma fresco y agradable, sin necesidad de utilizar químicos. La explicación está en sus aceites esenciales, que poseen propiedades repelentes capaces de mantener alejados mosquitos, hormigas y otras plagas.

Además, las cáscaras pueden funcionar como un desodorante ambiental ecológico. Basta con ubicarlas frescas en recipientes cerca de las aberturas para que el aire distribuya su fragancia; incluso secas, continúan liberando su característico olor cítrico durante varios días. Más allá de sus usos en el hogar, la mandarina también destaca por sus beneficios para la salud.
Rica en vitamina C, es una gran aliada para reforzar el sistema inmunológico, prevenir resfriados y favorecer la producción de colágeno, lo que mejora la firmeza y luminosidad de la piel. Su contenido de fibra ayuda a mantener una digestión saludable, mientras que su alto porcentaje de agua e índice calórico bajo la convierten en un snack ideal para hidratarse y cuidar la alimentación.
Su consumo también se asocia a la salud cardiovascular, ya que contribuye a reducir el colesterol LDL y mejorar la circulación. Además, su aporte de ácido fólico la hace especialmente importante durante el embarazo, participando en el desarrollo del sistema nervioso del bebé.
¿Cuántas frutas son saludables en una dieta?
El consumo de frutas es fundamental dentro de una alimentación equilibrada, y se recomienda incluir al menos tres porciones al día para mantener una buena salud. La Organización Mundial de la Salud (OMS) aconseja alcanzar un total de cinco porciones diarias entre frutas y verduras, siendo las frutas una parte esencial de este objetivo. No obstante, la cantidad adecuada puede variar según factores individuales como la edad, el nivel de actividad física y el estado de salud.

Las frutas aportan vitaminas, minerales, antioxidantes y fibra, y su ingesta frecuente está asociada a un menor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, hipertensión y afecciones inflamatorias, de acuerdo con información de MAPFRE España. Para obtener el máximo beneficio nutricional, es importante diversificar su consumo, incorporando variedades como cítricos, bayas y frutas tropicales, entre otras.
En cuanto a las formas de consumo, las frutas pueden disfrutarse frescas, crudas, en ensaladas, en postres como helados o integradas en diferentes preparaciones, tal como señala MAPFRE España. Sin embargo, algunas personas con condiciones específicas, como la diabetes, podrían requerir ajustes en la cantidad o el tipo de fruta que incluyen en su dieta.