Si escribes la letra P de esta forma, la grafología dice que eres una persona mentirosa
La grafología es una disciplina que busca comprender los rasgos de la personalidad de un individuo a través del análisis de su escritura manual. Cada letra del alfabeto tiene su propio simbolismo, y la forma en que se traza puede revelar aspectos inconscientes del carácter. En este caso, la mencionada disciplina abordará el comportamiento de las personas según cómo escriben la letra P.
Grafología: dime como escribes la letra P y te diré si mientes
Según la grafología, la letra P minúscula es particularmente reveladora, ya que su estructura se divide en dos partes: el óvalo superior, que representa la vida social y la imagen que se proyecta al exterior, y el trazo inferior o "jamba", que simboliza el mundo interior, las raíces y la esfera familiar. Cuando estos dos elementos no están en armonía, la escritura puede sugerir una contradicción en la personalidad.

Según los principios de la grafología, una persona que tiende a la falta de sinceridad puede manifestar ciertos rasgos específicos al escribir la letra P. Un indicio claro es cuando el trazo inferior o jamba es excesivamente grande y desproporcionado con respecto al resto de la letra.
Un óvalo inflado, casi como un globo, indica una imaginación desmedida que podría estar al servicio de la fabulación y la creación de realidades alternativas para el propio beneficio. Este gesto sugiere una disonancia entre lo que la persona muestra y lo que oculta, revelando un conflicto entre su mundo interior y su vida pública.

Además de su tamaño, la forma de la jamba también es significativa. Si el trazo de retorno del bucle inferior no se cierra de manera adecuada, si parece un garabato o si está enredado con el óvalo, se interpreta como un signo de que la persona podría estar ocultando algo, es decir, puede estar mintiendo.
Este tipo de trazo refleja una mente que opera con contradicciones, donde la verdad y la mentira se entrelazan de manera confusa. Por el contrario, una P bien proporcionada y con trazos limpios, sin complicaciones innecesarias, es vista como un signo de honestidad y equilibrio.