Pocos lo saben: esto es lo que sucede si tomas caña con ruda a diario
En muchos países de Sudamérica, cada agosto se lleva a cabo un ritual que combina tradición, creencias populares y sabor: beber caña con ruda. Esta costumbre, transmitida de generación en generación, tiene su momento central el 1 de agosto, cuando se toma un trago en ayunas con la intención de “espantar los males del invierno” y atraer salud y prosperidad, sin embargo, se puede beber a diario.
¿Qué sucede si bebo caña con ruda a diario?
Si se consume caña con ruda de manera frecuente, más allá del ritual tradicional del 1° de agosto, sus efectos pueden ir más allá de lo cultural. La ruda, conocida por sus propiedades digestivas, antiinflamatorias y calmantes, también contiene compuestos que en cantidades elevadas pueden resultar agresivos para el organismo.

Por su parte, la caña blanca es una bebida alcohólica de alta graduación, cuyo consumo habitual podría implicar riesgos para la salud, especialmente a nivel hepático y digestivo. Aunque un trago ocasional en el marco de la costumbre no suele representar problemas, la ingesta diaria podría tener un impacto acumulativo con el tiempo.
En este sentido, la tradición mantiene su valor como símbolo cultural y protector, pero es importante considerar que su uso frecuente no es algo habitual ni recomendado en la mayoría de las prácticas populares. Mantenerlo como parte de un ritual es, para muchos, la mejor forma de honrar la costumbre sin generar efectos no deseados.
¿Cómo preparar la caña con ruda?
Con raíces en las creencias guaraníes, la práctica se expandió a diversas regiones, donde la ruda es considerada una planta protectora y la caña, el medio ideal para potenciar sus efectos. Juntas forman una bebida que, para muchos, simboliza buena fortuna. La preparación es sencilla, pero requiere tiempo para que la ruda libere su aroma y propiedades.

Se utiliza caña blanca (similar al aguardiente) y ramas de ruda macho, que se colocan dentro de la botella para macerar por lo menos una semana, aunque lo ideal es hacerlo con un mes de anticipación. El brebaje se guarda en un lugar fresco y oscuro hasta el día del ritual.
El 1 de agosto, se toma un pequeño sorbo en ayunas, y algunos aseguran que lo ideal son tres tragos para potenciar sus beneficios.
Esta costumbre nació como una forma de protegerse de las enfermedades y los “malos aires” del invierno, ya que para los pueblos originarios agosto era un mes difícil debido al frío, el hambre y las epidemias. Con el tiempo, la caña con ruda se convirtió en un símbolo de resistencia, protección y esperanza para quienes la mantienen viva cada año.