No lo sabías: así puedes usar limones para cortar con la mala energía, según el Feng Shui
Dentro de las prácticas del Feng Shui, los limones emergen como un elemento sorprendentemente poderoso para cortar y absorber la mala energía del ambiente. Más allá de su vibrante color y aroma cítrico, esta fruta es valorada por su capacidad simbólica y energética para purificar y proteger los espacios, creando un flujo de energía positiva en el hogar. La clave reside en su colocación estratégica en puntos específicos de la casa.
Feng Shui: cómo usar limones para cortar con la mala energía
Según el Feng Shui, disponer limones en ciertas áreas puede actuar como un escudo contra las vibraciones negativas y un catalizador para la prosperidad. Aquí te detallamos dónde ubicarlos para maximizar sus beneficios:
- En la entrada de casa: colocar un cuenco con limones cerca de la puerta principal es una práctica recomendada. Se cree que actúan como un bloqueador natural, impidiendo que las energías negativas ingresen al hogar desde el exterior, asegurando que solo la buena vibra cruce el umbral.
- En la cocina: este espacio es considerado el corazón de la abundancia y la nutrición en el Feng Shui. Disponer limones aquí ayuda a reforzar la sensación de prosperidad y a mantener la energía en constante movimiento, favoreciendo el flujo de riqueza y bienestar.
- En el comedor o sala de estar: estas zonas son fundamentales para la interacción social y familiar. Los limones en estos ambientes contribuyen a mejorar el ambiente durante las reuniones y a prevenir la acumulación de energías negativas que puedan surgir de la convivencia o de las visitas.
- Debajo de la cama: aunque menos común, algunas tradiciones del Feng Shui sugieren colocar limones en un recipiente debajo de la cama. Se cree que esta práctica contribuye a limpiar la energía del espacio de descanso, promoviendo un sueño más reparador y liberando al cuerpo de las tensiones acumuladas durante el día.

Por otro lado, para que los limones cumplan su función purificadora, es fundamental reemplazarlos cuando se sequen, se deterioren o cambien de color, ya que esto indica que han absorbido energía negativa y necesitan ser desechados.