Las postura de yoga que te ayudarán a disminuir la celulitis
El yoga es una disciplina milenaria que ofrece incontables beneficios, tanto para la mente como para el cuerpo. Más allá de la flexibilidad y la calma que proporciona, ciertas posturas tienen un impacto directo en la salud de la piel y la circulación. Dentro de este repertorio, las posturas invertidas destacan como una herramienta poderosa para abordar problemas estéticos como la celulitis.
Estas asanas de yoga, que desafían la gravedad, no solo fortalecen el cuerpo, sino que también actúan sobre el sistema circulatorio y linfático, dos factores clave en la aparición de la celulitis.
La postura de yoga contra la celulitis
Una de las posturas de yoga invertidas más avanzadas y beneficiosas es Pincha Mayurasana, o la postura de la pluma del pavo real. En sánscrito, su nombre evoca la belleza y el equilibrio, reflejando la concentración y la fuerza que requiere. Es una asana de equilibrio sobre los brazos que demanda una gran estabilidad y control. Para el yogui avanzado, esta postura es un desafío tanto físico como mental, ya que implica superar el miedo a la inversión y mantener la concentración para encontrar el punto de equilibrio. Su dominio es un testimonio de la práctica constante y el progreso en la disciplina.
Los beneficios de las posturas invertidas en el yoga son notables, tanto a nivel físico como emocional. Físicamente, uno de los efectos más directos es la mejora de la circulación sanguínea. Al invertir el flujo de la sangre, estas posturas facilitan que la sangre rica en oxígeno llegue a la parte superior del cuerpo y a la piel del rostro. Esto se traduce en una tez más uniforme y luminosa, y puede hacer que ciertas manchas en la piel se vuelvan menos visibles. Es una forma natural de revitalizar el cutis y darle un brillo saludable.
Por otra parte, las posturas invertidas de yoga tienen un impacto directo en la circulación linfática. El sistema linfático es crucial para eliminar toxinas y residuos del cuerpo. Un flujo linfático deficiente puede provocar retención de líquidos y la acumulación de grasa que se manifiesta como celulitis. Al invertir el cuerpo, el yoga ayuda al sistema linfático a trabajar de manera más eficiente, facilitando el drenaje y la eliminación de líquidos retenidos. Esto ayuda a descomponer las acumulaciones de grasa y, con el tiempo, mejora significativamente la apariencia de la piel en las zonas afectadas.
