La planta milagrosa que te permitirá atraer dinero en julio, según los postulados del Feng Shui
Desde tiempos ancestrales, diversas culturas han atribuido a ciertas plantas propiedades místicas para atraer la prosperidad. Entre ellas, el laurel se destaca como un símbolo de victoria, éxito y, en prácticas esotéricas, de abundancia económica. En este sentido, el Feng Shui recomienda aplicar un ritual con este ejemplar para atraer dinero en julio.
Feng Shui: el ritual del laurel que atraer dinero y riqueza en julio
Este ritual se basa en la combinación de elementos cargados de simbolismo para potenciar la atracción de la prosperidad. Para llevarlo a cabo, se necesitan solamente tres hojas de laurel, media taza de arroz y media taza de granos de café. Estos tres componentes no son elegidos al azar: la planta representa el triunfo, el arroz simboliza la abundancia y la fertilidad, y el café es conocido por su energía vibrante y su capacidad para activar las intenciones. La fusión de estas energías busca crear un campo propicio para la manifestación de la riqueza.
Para la preparación del ritual, primero, en un cuenco, mezclar el arroz y los granos de café, creando una base. Luego, se insertan las puntas de las tres hojas de laurel en esta mezcla, de manera que una parte de la hoja quede expuesta por encima del arroz y el café. Una vez dispuestas las hojas, con la ayuda de un encendedor o una cerilla, encender cuidadosamente las puntas. Es fundamental permitir que las hojas ardan por completo, liberando su humo característico en el ambiente.
La esencia de este ritual reside en la intención y la concentración. Mientras las hojas de laurel se consumen y su humo purificador se esparce, es crucial que la persona que realiza el rito concentre sus pensamientos en sus objetivos financieros y en el éxito en su carrera y vida en general. El humo del laurel posee la capacidad de limpiar y purificar los espacios de energías negativas, a la vez que recarga el ambiente con vibraciones positivas, favoreciendo la atracción de la prosperidad y el dinero.
