El árbol de palta es muy valorado en los hogares por sus múltiples beneficios, pero también puede enfrentar problemas que amenazan su salud. Uno de los más comunes es la infestación de la araña roja, una diminuta plaga difícil de detectar a simple vista que puede afectar tanto las hojas como los frutos del árbol.

¿Cómo proteger mi árbol de palta?

Este ácaro se alimenta de la savia de la planta, provocando daños visibles como manchas amarillentas o bronceadas en el envés de las hojas. En casos más graves, pueden aparecer pequeñas telarañas, señal clara de su presencia.

Si no se actúa a tiempo, el árbol puede perder hojas de forma prematura, reduciendo así su capacidad de hacer fotosíntesis y debilitándose notablemente. Los frutos, por su parte, pueden desarrollar deformaciones o dañarse severamente.

Para combatir esta plaga, existen distintas estrategias. El control cultural implica retirar y destruir las partes afectadas del árbol, como hojas o ramas infestadas. En el caso del control biológico, se recomienda fomentar la presencia de enemigos naturales de la araña roja, como los ácaros depredadores “Phytoseiulus persimilis” o insectos como la crisopa.

Si el problema persiste, puede recurrirse al uso de productos químicos específicos, aunque esta opción suele ser más costosa y debe aplicarse con precaución. En casos severos, lo más recomendable es contactar a un profesional en control de plagas.

¿Por qué mi árbol de palta tiene plagas?

Las plagas que afectan a los árboles de aguacate pueden originarse por diversos factores, entre ellos la presencia de hongos, condiciones ambientales poco favorables o la falta de un manejo integrado adecuado.

Las enfermedades causadas por hongos, como la antracnosis o la enfermedad de Verticillium, son especialmente frecuentes en climas húmedos o en suelos con mal drenaje, y pueden dañar las raíces, hojas, ramas y frutos del árbol. Además, distintas plagas específicas, como los barrenadores de fruto y rama, los trips, la araña roja y las cochinillas, también representan una amenaza para los aguacateros.

Otro factor que contribuye a la vulnerabilidad del árbol es el desequilibrio nutricional, pues la carencia de nutrientes en el suelo puede debilitarlo y aumentar su susceptibilidad a plagas y enfermedades. Para enfrentar estos problemas, se recomienda implementar un manejo integrado de plagas que combine diferentes métodos de control.

Entre ellos, el control biológico mediante la utilización de enemigos naturales de las plagas, como insectos depredadores, resulta muy efectivo. Asimismo, el control cultural, que incluye mantener la higiene del huerto eliminando frutos caídos y ramas enfermas, es fundamental para prevenir la proliferación de plagas.

En casos de infestaciones severas, puede ser necesario recurrir a insecticidas y fungicidas, preferiblemente aquellos con menor impacto ambiental. Para prevenir estos problemas, es importante asegurar un buen drenaje del suelo para evitar la acumulación de agua, fertilizar adecuadamente para fortalecer la planta, inspeccionar regularmente los árboles para detectar a tiempo cualquier indicio de plagas o enfermedades, y podar las ramas afectadas para evitar la propagación de patógenos.