La comida que debes ingerir al menos una vez por semana para mejorar tu salud
En la búsqueda constante de estrategias de comida para promover la salud y prevenir el deterioro cognitivo, un alimento básico y familiar ha resurgido con una nueva promesa: el queso. Consumir queso al menos una vez por semana se ha asociado con un menor riesgo de desarrollar demencia, según recientes hallazgos en el campo de la nutrición y la neurología.
Este no es solo un placer gastronómico; el queso es un ingrediente que, por sus propiedades intrínsecas, podría estar ofreciendo beneficios significativos para el mantenimiento y la protección de nuestras funciones cerebrales.
Los beneficios de comer queso
Una de las razones fundamentales detrás de este efecto protector radica en la composición nutricional de este lácteo. El queso es una fuente concentrada de proteínas y aminoácidos esenciales que son cruciales para el mantenimiento neuronal y la comunicación celular. Además, contiene vitaminas liposolubles clave, como la Vitamina K2, que desempeña un papel vital en la salud vascular y en la homeostasis del calcio. Estos componentes trabajan de forma sinérgica para apoyar la estructura y la función óptima del tejido cerebral.
El impacto del queso en la salud va más allá de sus nutrientes individuales, afectando también sistemas biológicos clave relacionados con el envejecimiento. Se han encontrado indicios de que el queso y otros lácteos fermentados pueden ejercer una influencia positiva en la inflamación sistémica, un conocido factor de riesgo de deterioro cognitivo. Más aún, estos alimentos parecen interactuar con el eje intestino-cerebro, una vía de comunicación bidireccional que modula la salud mental y la cognición. Un intestino sano, impulsado por alimentos fermentados, parece correlacionarse con un cerebro más sano.
Además de los beneficios directos sobre el cerebro, el consumo de queso se asocia con la reducción de factores de riesgo sistémicos que indirectamente afectan la salud cognitiva. En general, los lácteos fermentados se asocian con menores riesgos de enfermedades cardiovasculares y metabólicas. Tanto las enfermedades cardíacas como las metabólicas son factores de riesgo bien establecidos para el desarrollo de la demencia. Al mejorar la salud del corazón y el metabolismo, el queso ayuda a crear un entorno vascular más saludable, lo cual es esencial para el suministro de oxígeno y nutrientes al cerebro.
