El secreto de expertos para eliminar el moho de la goma de tu refrigeradora sin gastar dinero
Limpiar y ordenar el refrigerador es un atarea un tanto difícil en ciertas situaciones, si no tienes los trucos correctos. Sin embargo, para evitarte un mal momento debes hacerlo de manera regular, para que no se genere moho en los rincones, aunque si ya te pasó, puedes quitarlo en dos minutos y sin gastar dinero en detergentes.
¿Cómo eliminar el moho del refrigerador?
Eliminar el moho de las gomas de la heladera es fundamental para mantener un ambiente limpio y saludable en la cocina. Un método eficaz es usar vinagre blanco, mezclado con agua en partes iguales, rociándolo sobre las gomas y dejándolo actuar unos minutos antes de frotar con un cepillo o paño suave. Otra opción es aplicar una pasta de bicarbonato de sodio y agua, frotar con un cepillo de dientes y enjuagar bien.
El peróxido de hidrógeno también es útil, aplicándolo directamente sobre las gomas, dejándolo actuar y luego frotando. Una combinación de bicarbonato y peróxido crea una pasta poderosa que elimina el moho de manera efectiva. Es importante mantener las gomas secas y limpias para prevenir la reaparición del moho y asegurar un ambiente libre de hongos, protegiendo así los alimentos y la salud en la cocina.
¿Por qué se forma moho en el refrigerador?
El moho se forma debido a la humedad y los restos de comida. Varios factores contribuyen al crecimiento del mismo, como la humedad, ya que este hongo prospera en ambientes húmedos. Además, las temperaturas cálidas, especialmente entre 20° y 30°C, favorecen su desarrollo.
Los alimentos con alto contenido de azúcares, proteínas y almidones son más propensos a ser afectados por el moho. Asimismo, cuanto más tiempo se almacenan los alimentos, mayor es la probabilidad de que se forme moho en ellos. El moho en el refrigerador puede ser perjudicial para la salud por diversas razones.
La exposición al moho y sus esporas puede desencadenar reacciones alérgicas o crisis de asma en personas sensibles. Además, suele causar infecciones micóticas e irritaciones en los ojos, la piel, la nariz, la garganta y los pulmones. Algunos tipos de moho producen micotoxinas, sustancias venenosas que pueden ser peligrosas para la salud.
La exposición prolongada al moho negro, en particular, puede generar problemas graves como infecciones pulmonares, inflamación de las vías respiratorias, fatiga, dolores de cabeza persistentes, trastornos neurológicos y debilitamiento del sistema inmunológico. Aunque la mayoría del moho en los alimentos no es tóxico, es difícil identificar qué tipos pueden ser dañinos, por lo que se recomienda estar atento a síntomas como náuseas, diarrea o dificultad para respirar y consultar a un médico si se presentan.
Además, debes conocer cómo despedirte de los malos olores en el refrigerador y que tus alimentos se conserven frescos y en perfecto estado por más tiempo. Alarga la vida útil de tu comida pero sobre todo de tus electrodomésticos, como la nevera, para no gastar dinero en ellos.