Descubre cómo obtener una vitamina clave para evitar resfríos en el invierno
Existen miles y miles de técnicas que las personas utilizan para mejorar la salud. Muchos optan por seguir la corriente farmacéutica, mientras que otra tendencia apunta a informarse de una forma más natural. En ese último mundo, hay que saber sobre una vitamina que es clave para evitar los resfríos.
Estos cuidados ayudan mucho a mejorar la salud. Hacerlo en forma diario puede mejorar notablemente la situación de los individuos proporcionándole datos y herramientas ventajosas. Si eres de ellos, debes conocer el consejo de los expertos en salud sobre cuál es la vitamina clave para evitar resfríos en el invierno.
Adiós a los resfríos, hola salud
La vitamina C es hidrosoluble, lo que implica que el cuerpo no la almacena y cualquier exceso es eliminado a través de la orina. Esta característica presenta un desafío importante para la salud: si se consume una gran cantidad de golpe, el organismo no logra absorberla en su totalidad, desperdiciando parte de sus beneficios. Por ello, la doctora Johnston sugiere una estrategia más efectiva: dividir la dosis diaria en varias tomas para maximizar su absorción intestinal y asegurar que tu cuerpo aproveche al máximo este valioso nutriente.
Aunque no existe una hora universalmente "perfecta" para ingerir vitamina C, consumirla junto con las comidas puede ser beneficioso para la salud. Esta práctica no solo ayuda a reducir cualquier posible malestar estomacal, especialmente en personas con sensibilidad, sino que también tiene una ventaja adicional. Al tomarla con alimentos, se favorece la absorción de hierro, otro nutriente esencial para el buen funcionamiento del cuerpo y que a menudo se encuentra en la misma dieta.
Incorporar vitamina C de manera inteligente en tu rutina diaria es clave para blindar tu salud durante el invierno. Optar por fuentes ricas en esta vitamina como cítricos, kiwis, pimientos o brócoli, y distribuirlas a lo largo del día, te ayudará a mantener tus defensas altas. Recuerda que una ingesta regular y fraccionada es mucho más efectiva que una dosis única y elevada, garantizando que tu sistema inmune esté siempre listo para enfrentar los desafíos de la estación.
