3 remedios caseros que eliminan el sarro de grifos y surtidores en tiempo récord

La acumulación de sarro en los grifos, surtidores y canillas es un inconveniente habitual en cualquier hogar, provocado principalmente por la cal presente en el agua potable. Minerales como el calcio y el magnesio se adhieren a las superficies de bronce y acero inoxidable con el tiempo, formando esa antiestética capa blanca e incluso llegando a causar obstrucciones. Para quitar esta suciedad, especialistas recomiendan poner en práctica los siguientes remedios caseros.

Adiós sarro: cómo limpiar grifos y surtidores con remedios caseros

Vinagre y agua

Una de las combinaciones más infalibles para combatir el sarro es la mezcla de vinagre blanco y agua. Este truco es ideal por su facilidad de preparación y aplicación. Simplemente hay que verter ambos ingredientes en partes iguales dentro de un pulverizador o botella con atomizador.

Una vez mezclado, rociar generosamente la solución sobre la superficie del grifo o surtidor afectada por el sarro. Dejar que la mezcla actúe durante aproximadamente 5 minutos. El vinagre, gracias a su acidez, comenzará a disolver los depósitos minerales. Pasado este tiempo, frotar la zona con un cepillo (puede ser un cepillo de dientes viejo o uno específico para limpieza) para desprender el sarro y, finalmente, enjuagar con agua limpia.

Limón

El limón es otro aliado poderoso en la lucha contra el sarro, gracias a su alto contenido de ácido cítrico. Solo necesitas cortar la fruta por la mitad y utilizar una de las mitades para frotar directamente el grifo. La acidez de la fruta actuará de inmediato sobre el sarro.

Dejar que el jugo de limón haga su efecto durante unos 3 minutos. Después, con un paño limpio y húmedo, retirar los restos de sarro y suciedad. Este método es especialmente útil para manchas leves o para un mantenimiento regular.

Sal y vinagre

Para sarro más incrustado o para un efecto más abrasivo sin dañar la superficie, la combinación de sal gruesa y vinagre es una excelente opción. Prepara una pasta mezclando vinagre blanco con sal gruesa hasta obtener una consistencia manejable.

Aplicar esta pasta directamente sobre la superficie afectada del grifo utilizando un cepillo, asegurándote de cubrir bien el sarro. Para potenciar su acción, puedes envolver la zona con papel de aluminio y dejar actuar durante unos 3 minutos. El papel de aluminio puede ayudar a concentrar la acción del vinagre y la sal. Transcurrido el tiempo, retirar la pasta con un paño limpio y húmedo.