Esta temporada, la mayoría de los cortes de pelo más populares incluyen flequillo, un estilo que favorece y ayuda a equilibrar las facciones. Sin embargo, parece que para el otoño esta tendencia perderá fuerza, dando paso a cortes sin flequillo que dejarán el rostro despejado para que las cejas y la mirada sean las protagonistas.

¿Qué corte de pelo reemplazará al flequillo?

Varios estilos que normalmente llevan flequillo optarán por prescindir de él. Entre ellos, el soft shaggy se destaca por transformar las melenas largas con capas suaves y estratégicas, ideales para cabellos finos y especialmente favorecedor para rostros angulosos o redondos, pues sin flequillo el rostro se ve más alargado y definido.

Por otro lado, el bob asimétrico, con su parte trasera más corta y raya lateral, es perfecto para aportar volumen y se adapta bien a cualquier tipo de cabello y rostro, con un efecto rejuvenecedor gracias a la raya ladeada que suaviza los rasgos. Finalmente, la melena clavicut, otro favorito en salones, mantendrá su presencia en otoño.

Este corte, que llega a la altura de las clavículas con un largo ligeramente mayor en el frente, se verá en su versión más suavizada. Para lucirlo al máximo, se recomienda un brushing con cepillo redondo y secador que aporte aire y volumen, resaltando su dinamismo y favoreciendo todo tipo de rostros.

¿Cómo lograr que mi cabello tenga brillo?

Para lograr un cabello brillante es esencial mantenerlo bien hidratado y protegido, utilizando productos adecuados y evitando daños causados por el calor. Contar con una rutina de cuidado completa, que incluya masajes capilares y un cepillado correcto, también contribuye significativamente a mejorar su apariencia. Es recomendable aplicar mascarillas hidratantes semanalmente y usar acondicionador tras cada lavado para suavizar la cutícula.

Además, el uso de protectores térmicos antes de emplear herramientas como secadores o planchas ayuda a prevenir daños. Incorporar aceites naturales como el de argán, coco o jojoba nutre el cabello y le aporta un brillo extra. También es importante limitar el uso excesivo de calor o emplear temperaturas bajas. Lavar el cabello con agua fría contribuye a sellar la cutícula, aumentando su brillo natural.

Para distribuir los aceites propios del cabello, es ideal cepillarlo con suavidad usando un cepillo de cerdas de jabalí. La alimentación juega un papel clave, pues una dieta equilibrada rica en vitaminas y minerales favorece la salud capilar. En casos que lo requieran, los tratamientos profesionales pueden ofrecer un impulso adicional para el brillo. Finalmente, dormir sobre fundas de almohada de seda ayuda a reducir la fricción y el quiebre del cabello, manteniéndolo más saludable y luminoso.