La postura de yoga que te mejorará tu postura corporal

Entre las asanas más reverenciadas y desafiantes del yoga se una postura de equilibrio sobre las manos que despierta tanto fascinación como intimidación. Además de ser relajante, también es muy importante para tu salud.

Si bien su ejecución parece requerir una fuerza hercúlea en los brazos, esta pose sagrada de yoga esconde un secreto: su verdadero poder reside en el centro del cuerpo y su capacidad para transformar tu postura corporal. Dominarla es un viaje que fortalece no solo tu físico, sino también tu mente, enfrentándote a tus miedos y enseñándote el valor de la práctica constante.

La postura de yoga para la salud

La historia del nombre de esta asana es un ejemplo de confusión lingüística que se ha mantenido en el tiempo. En sánscrito, baka significa "grulla" y asana se traduce como "postura". Lógicamente, debería llamarse "postura de la grulla"; sin embargo, por razones desconocidas, en algún momento alguien la denominó erróneamente "postura del cuervo" y el nombre se popularizó. Más allá de su nomenclatura, Bakasana es una asana avanzada y compleja del yoga que exige dedicación, mucha práctica y, sobre todo, una comprensión profunda de la alineación corporal.

Aunque la sensación inicial al intentar Bakasana es que toda la fuerza debe concentrarse en los brazos, la realidad es que el esfuerzo principal está localizado en los Bandhas, los "cierres" energéticos del cuerpo, es decir, el abdomen y la zona pélvica. El fortalecimiento de esta musculatura profunda es lo que permite levantar el cuerpo y mantener el equilibrio, y es directamente responsable de los beneficios posturales con el yoga. Al comprometer el core, Bakasana ayuda a tonificar los abdominales, la espalda baja y los pectorales, contribuyendo así a una salud postural envidiable.

La práctica regular de esta asana de yoga trae consigo una serie de beneficios físicos. Al sostener el peso del cuerpo con los brazos flexionados, se logra una notable tonificación de los brazos y los pectorales. Más allá de la fuerza evidente, el trabajo de elongación y estabilidad en la columna contribuye a mejorar la capacidad pulmonar. Los expertos sugieren que para poder aprovechar al máximo estos beneficios del yoga, los ejercicios deben practicarse con regularidad, integrando Bakasana como un desafío constante en la rutina semanal.