El truco de expertos en jardinería para reproducir una lengua de suegra con éxito
Dentro del universo de las plantas de interior que combinan sofisticación y sencillez en su cuidado, la lengua de suegra ocupa un lugar destacado. Esta especie no solo embellece los espacios con su porte elegante y sus distintivas hojas verticales, sino que también contribuye a purificar el aire interior, eliminando diversas toxinas.
Si tienes una de estas plantas y quieres multiplicar sus beneficios, expertos en jardinería comparten un método de propagación sorprendentemente fácil y efectivo. Según cuentan los especialistas, reproducir una lengua de suegra es un proceso accesible que requiere tan solo unos pocos materiales básicos: un par de tijeras limpias y desinfectadas, y un poco de agua.
Jardinería: así puedes reproducir una lengua de suegra
El primer paso consiste en seleccionar una planta madre de Sansevieria y elegir una de sus hojas que se encuentre en óptimas condiciones, asegurándose de que esté sana y libre de cualquier signo de enfermedad o daño.
Una vez seleccionada la hoja, el siguiente paso es realizar un corte limpio en su base, dándole una forma triangular. Este corte parece estimular el desarrollo de nuevas raíces. A continuación, se toma un recipiente con agua potable, preferiblemente libre de cal y cloro para evitar afectar el desarrollo de la planta. La hoja cortada se introduce en este recipiente, sumergiendo la base donde se realizó el corte.
El proceso de enraizamiento requiere paciencia. Durante una o dos semanas, se debe observar la hoja sumergida en el agua. Transcurrido este tiempo, comenzarán a aparecer las nuevas raíces, señal de que la propagación está teniendo éxito.
Una vez que las raíces han alcanzado un tamaño considerable, debes retirar la nueva plántula del recipiente con agua y trasplantar a una maceta individual con un sustrato especialmente formulado para suculentas. Este tipo de sustrato proporciona el drenaje adecuado que la lengua de suegra necesita. Después del trasplante, regar la nueva planta como de costumbre, manteniendo el sustrato ligeramente húmedo pero evitando el encharcamiento.
