Descubre cómo saber si tus plantas están muertas o en reposo con estos simples consejos de jardinería
Es un error común, incluso entre jardineros experimentados, confundir una planta que ha entrado en un período de reposo con una que ha muerto. Las señales visuales pueden ser idénticas: hojas caídas, tallos flácidos o ausencia de crecimiento. Sin embargo, comprender la diferencia es crucial para no desechar ejemplares con potencial de recuperación. A continuación, te revelaremos algunos trucos de jardinería.
Jardinería: cómo saber si una planta está muerta o en reposo
Para distinguir entre una planta muerta y una en reposo, es fundamental considerar la estación del año y el tipo de hoja de la especie:
- Plantas de hoja caduca: en estas plantas, el estado de reposo es relativamente fácil de identificar. Sus hojas cambian de color, se caen completamente y el crecimiento se detiene. Si tu ejemplar muestra estas características durante su temporada natural de reposo (generalmente otoño e invierno), es casi seguro que está hibernando y se recuperará en primavera.
- Plantas de hoja perenne: el desafío es mayor con las plantas de hoja perenne, ya que tienden a mantener su apariencia verde durante la hibernación. La señal más clara de que una planta perenne ha muerto es un cambio drástico y permanente en su color verde clásico hacia tonos marrones o negros, acompañado de una debilidad total e irreversible de la estructura.

Además, los especialistas en jardinería sostienen que existen indicios específicos que te ayudarán a diferenciar:
- Signos de reposo: hojas marchitas pero no totalmente secas o rotas, el crecimiento se detiene por completo, los tallos pueden sentirse flácidos pero aún son flexibles y no se rompen fácilmente, y las raíces, al ser examinadas, se ven flexibles y saludables, no blandas ni podridas.
- Signos de muerte: hojas completamente caídas y secas, flores que se han vuelto negras, posible acumulación de telarañas (indicando una planta débil o inactiva por mucho tiempo), raíces con un olor a moho o podredumbre, y brotes secundarios con coloración marrón o negra.

Un truco definitivo para confirmar el estado de tu planta es rascar suavemente una pequeña parte del tronco o tallo con una uña o un objeto afilado. Si el interior es verde y fresco, la especie está viva y simplemente en reposo. Si el interior es marrón y seco, el ejemplar ha muerto.